Aportes

Aportes de los juegos de rol



Beneficios en la educación

  • El juego, en general, es fundamental en el proceso de enseñanza-aprendizaje: a la hora de aprender, la calidad con que una persona aprende algo se basa en la utilidad práctica que le encuentre a dicho conocimiento. El juego permite acceder al conocimiento de forma significativa, pues convierte en relevantes, informaciones que serían absurdas de otra manera.
  • Cálculo mental, aprendizaje de accidentes geográficos y nombres, adquisición de soltura a la hora de esquematizar y tomar notas…
  • Otro gran aporte de estos juegos en beneficio del desarrollo educativo, es la promoción de la lectura como medio lúdico y recreativo, lo que a la larga favorece la creación de hábitos que ayudan a superar muchas de las dificultades que surgen en los estudios como consecuencia de una deficiente lectura comprensiva, por falta de motivación.
  • Otro aspecto que ayuda a desarrollar los juegos de rol es la adquisición de una gran riqueza expresiva. Con estos juegos se desarrolla una gran riqueza de vocabulario, otro de los grandes déficit que suele ser origen del fracaso escolar.
  • Los juegos de rol también estimulan el potencial creativo e imaginativo de la persona, además de hacer trabajar el razonamiento y la lógica durante el transcurso de las aventuras al enfrentar nuevos panoramas, retos y confrontaciones e intentar solucionarlos.

Aporte a determinadas actitudes

  • Al desarrollo de la empatía y la tolerancia: mediante estos juegos se aprende a meterse en la piel de «otro» y empezar a plantearse qué sienten los demás en situaciones que pueden ser ajenas en un principio.
  • A la socialización: el Juego de Rol fomenta el apoyo mutuo y la relación en términos de igualdad. Como ya se ha dicho: no se trata de juegos competitivos, sino cooperativos.
  • A la potenciación de habilidades no explotadas y comprensión de aspectos no desarrollados de la personalidad.
  • Al encuentro de intereses y gustos personales.
  • A la toma de conciencia y responsabilidad: a lo largo del juego, los participantes se enfrentan a decisiones que llevan a sus correspondientes consecuencias. Esto es importante para crear en el individuo una consciencia más amplia de sus actos.
  • A la sublimación de los aspectos reprimidos de la personalidad: al ser un juego en el que cada uno interpreta un personaje, en la mayoría de los casos el personaje encarnado es una proyección de ciertos aspectos reprimidos en el jugador.
  • A la capacidad de trabajo en grupo y toma de decisiones, habilidades que son de gran importancia en la sociedad, y muy valoradas a la hora de buscar un trabajo.
  • A la capacidad de improvisación y resolución de problemas, pues se basan en plantear situaciones que han de ser resueltas en función de las habilidades del personaje.

Aporte para un buen estado de salud mental

  • Los juegos de rol de fantasía han servido para ayudar a grupos de niños entre ocho y nueve años socialmente inadaptados. Estos desarrollaron habilidades de cooperación mutua.
  • Tras pasar un test de personalidad en jugadores habituales a este tipo de juegos, no se encontró ninguna desviación de la personalidad, con la posible excepción de un incremento en el factor Q1 (inclinación a la experimentación, liberal, librepensador).
  • Los resultados obtenidos de la investigación sobre el valor de los juegos de rol de fantasía como estrategia para desarrollar la escritura creativa de los niños, demuestra un mayor desarrollo para alumnos de Primaria y Secundaria de las habilidades de escritura, vocabulario y organización de estructuras verbales.
  • Se usaron cuestionarios y test de factores de la personalidad para evaluar a jugadores y a no jugadores, y no se encontraron diferencias, a excepción de una puntuación significativamente más alta entre los no jugadores de cierta tendencia a la psicosis (que se relaciona con la criminalidad). Sin embargo, este rasgo no se puede medir con total fiabilidad y su relación con el comportamiento criminal no está confirmada, así que no se puede extraer una conclusión acerca de los posibles beneficios de los juegos de rol. Los investigadores especulan que la persistente imagen negativa sobre estos juegos proviene de no haber oído nada sobre el juego aparte de las noticias alarmistas de la prensa.

Desarrollo del área cognoscitiva en el niño de edad preescolar


1.       Desarrollo de la concentración de la atención, muy relacionada con el interés inmediato.
2.      Aumento de la sensibilidad visual, acústica y táctil.
3.      Aparición de la noción especial de los objetos y personas, y el desarrollo de la percepción del movimiento.
4.      Desarrollo de la memoria figurativa y semántica.
5.      La imaginación reconstructiva y creadora evoluciona sobre la base del juego y las actividades productivas.
6.      El pensamiento visual por acción y por imágenes o representativo, permite resolver problemas, comienza a anticiparse a la actividad práctica.
7.      La palabra interviene en el razonamiento. Hay un desarrollo intenso del habla y se llega a dominar la lengua materna.
8.      Este es un periodo de desarrollo sensorial e intelectual. Área afectiva – motivacional- volitiva
9.      Desarrollo de la esfera motivacional. Ya es capaz de jerarquizar los motivos, de desarrollar los motivos sociales, y de relacionar los motivos entre sí. Hacen esfuerzos volitivos por un objetivo emocionalmente atractivo y de alcance inmediato.
10.   Se desarrolla la esfera de los sentimientos intelectuales, estéticos y morales. Se sientan las bases para muchos sentimientos morales positivos: amistad, camaradería, sentido del deber, responsabilidad.
11.    Se asimilan las normas éticas de los mayores, como modelos morales y normas de conducta.
12.   La utilización de la voluntad en las ocasiones premeditadas de los juegos y en las actividades productivas, propiciando la autorregulación del comportamiento.
13.   Ejerce una influencia en el desarrollo de la personalidad del niño, pues cambian las necesidades espirituales: de conocimiento y de comunicación con otras personas. Una particularidad es la aparición de determinadas relaciones del niño con sus coetáneos la formación de la sociedad infantil.